Detectado un anillo en el planeta enano Haumea

16-10-2017 10:00
Ilustración artística del sistema Haumea

Ilustración artística del sistema Haumea

En los confines del Sistema Solar, más allá de la órbita de Neptuno, existe un cinturón de objetos compuestos de hielos y rocas entre los que destacan cuatro planetas enanos: Plutón, Eris, Makemake y Haumea. Este último, el más desconocido de todos, ha sido objeto de una campaña internacional de observación que ha permitido determinar sus principales características físicas. El estudio, publicado en la revista Nature, cuenta con la participación de científicos del CEFCA y desvela la presencia de un anillo en torno al planeta enano Haumea.

Los planetas enanos se encuentran a grandes distancias de la Tierra por lo que no puede observarse directamente su forma y superficie. Incluso los telescopios más potentes sólo los pueden ver como un punto luminoso que se mueve lentamente entre las estrellas del cielo. Y precisamente por el hecho de que se mueven, de vez en cuando pasan por delante de la línea de visión de una estrella con la Tierra, en un fenómeno que se llama ocultación, durante el cual el planeta enano "tapa" a la estrella y se reduce la luz que se recibe en el telescopio. Si el planeta enano es muy débil lo que se observa es directamente la desaparición de la estrella y su reaparición algunos segundos después.

Utilizando una ocultación, un grupo internacional de astrónomos, liderado por el científico José Luis Ortiz Moreno, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA), ha logrado medir con precisión la forma y el tamaño del planeta enano Haumea, y además detectar la presencia de un anillo de material entorno al planeta enano.

El equipo del IAA predijo la banda de ocultación desde donde se podría observar el fenómeno producido por Humea sobre la estrella URAT1 533-182543 el pasado 21 de enero y coordinó las observaciones desde un numeroso grupo de lugares distribuidos por toda Europa, pero fueron 10 observatorios distribuidos por Italia, Alemania, Hungría, Eslovaquia y la República Checa los que vieron como la estrella desaparecía por detrás de Haumea y sus anillos.

"A partir de los instantes de desaparición y aparición de la estrella se ha podido reconstruir la forma de este planeta enano, que resulta estar bastante achatada debido a su velocidad de rotación elevada. Además se registraron pequeñas bajadas de brillo en la estrella justo antes y después de la ocultación, lo que permitió detectar los anillos y medir su posición con respecto al cuerpo principal", explica Ramón Iglesias, astrónomo del CEFCA y coautor del estudio.

Haumea, descubierto en 2003 por el grupo de José Luis Ortiz, orbita a una distancia de 7400 millones de kilómetros del Sol, unas 50 veces la distancia Tierra-Sol y su velocidad de rotación es de 3.9 horas, mucho más rápido que cualquier otro cuerpo de más de cien kilómetros de todo el Sistema Solar. Esta velocidad provoca que Haumea se deforme, adquiriendo una forma elipsoidal similar a un balón de rugby. Gracias a los datos recién publicados, se conoce que Haumea mide unos 2.320 kilómetros en su lado más largo, casi igual que Plutón, pero que carece de una atmósfera global similar a la de Plutón.

Además, ha deducido el tamaño de los anillos, que están en resonancia 3:1 con el planeta, o que significa que las partículas heladas que componen el anillo completan un giro en torno al planeta en el tiempo en que este rota tres veces. "Aunque ya se conocía la presencia de anillos alrededor de planetas (Saturno, Júpiter, Urano) y de algunos asteroides de tipo centauro (Chariklo) esta es la primera vez que se detecta un anillo en torno a un planeta enano, lo que hace pensar que estas estructuras podrían ser más comunes de lo que se pensaba", explica Ramón Iglesias.

En este descubrimiento han participado científicos de varios centros españoles. Además del IAA, han colaborado en la reducción y análisis de datos científicos del Centro de Estudios de Física del Cosmos de Aragón (CEFCA), la Universidad del País Vasco, de las Universidades de Alicante y Valencia.

Video: Reproducción artística del sistema de Haumea